El LHC confirma con rotundidad el Bosón de Higgs
No, no estáis viviendo un deja vú. No es que hayamos estado viviendo en una cueva y nos acabemos de enterar de que el famoso Bosón de Higgs existe y ya forma parte del Modelo Estándar de la física. No, lo que sucede es que existía una pequeña probabilidad de error cuando se anunció su descubrimiento a bombo y platillo, y ahora se ha podido confirmar con rotundidad. ¿Lo bueno? Peter Higgs estará dando saltos de alegría desde que predijo esta partícula allá por los años 60. ¿Lo “malo”? Con esto se confirma, de nuevo, el Modelo Estántar de la Física.
Hace relativamente poco ya os hablamos en DDC sobre otras pruebas que confirman este modelo actual de la física, como puede ser el hecho de haber descubierto ciertos tipos de quarks tras millones de colisiones en el LHC. Pero, como habréis podido detectar, he comentado que hay una parte “mala” en el hecho de que el Bosón de Higgs se comporte total y absolutamente como cabía esperar. Si, es una gran victoria para la ciencia, pero el modelo actual de la física sigue sin variación alguna… Ni supersimetría, ni materia ni energía oscura. El bosón se comporta tal cual se predijo hace 50 años, algo bueno y decepcionante a la vez.
El estudio que lo confirma totalmente, publicado en Nature Physics, afirma que la particula observada el pasado 2012 se desintegra en fermiones. Para que entremos en materia, anteriormente solo se había confirmado que esta partícula podía convertirse en bosones, unas partículas portadoras de energía (igual que los fotones y electrones). Sin embargo, los fermiones son partículas portadoras de masa (como los protones y neutrones).
En el modelo del Bosón de Higgs se predecía que esta partícula es la que da la masa a estos fermiones. Y ahora, tras la rotura de protones por el LHC, el CMS ha confirmado que si es así.
Todas las características del Bosón de Higgs confirmadas
Gracias a este estudio se ha confirmado todo lo que se esperaba del bosón: Se asienta en la región de masa-energía de 125 GeV, no tiene espín (momento angular) y puede descomponerse en una variedad de partículas más ligeras como fotones o fermiones. Así se puede afirmar totalmente que el bosón de Higgs es el que da la masa a todo el mundo que nos rodea, tal y como predecía el Modelo Estándar de Higgs.
Como decíamos anteriormente, esto es bueno y malo a la vez. Bueno, porque cualquier confirmación es una alegría para la ciencia. Malo, porque solo con que los resultados hubiesen variado minimamente se habrían abierto nuevas vías de investigación para saber que se nos escapa.
Pero esto no quiere decir que debamos estar decepcionados totalmente. Por el momento, existen cosas que el Modelo Estándar de la física no ha sido capaz de explicar: Gravedad, energía y materia oscura, y alguna que otra peculiaridad de la realidad. Por ello, la teoría de la supersimetría aún no ha muerto totalmente, ya que dicha teoría postula que cada partícula del modelo actual cuenta con una supercompañera (“S-Partícula”) increíblemente fuerte, lo cual explicaría que el 23% del universo esté aparentemente constituído por materia oscura. El problema es que no hemos llegado a encontrar ni una ínfima parte de esa materia oscura, por lo que tenemos un misterio sin resolver.
Se espera que cuando se vuelva a encender el LHC en 2015 tendrá la energía suficiente para descubrir estas S-Partículas, ya que podrá usar una energía de colisión de 13 TeV. Si aún así no es posible el descubrimiento, habrá que esperar al sucesor del LHC, el cuál contará con 60 kilómetros más de longitud.
Fuente: www.extremetech.com