En el ojo las rutas escolares de Bogotá

6 de octubre de 2016 Vega

Este año, la Secretaría de Movilidad de Bogotá, ha impuesto 607 comparendos y ha hecho 258 inmovilizaciones, a vehículos de rutas escolares.

Las empresas de servicio de rutas escolares traen a los colegios de la capital del país, con muchos inconvenientes para llevar a cabo un servicio, que cumplan con las normativas y decretos que ha emitido el Ministerio de transporte, según la Secretaría de Movilidad, durante el año 2015 tuvo que imponer 1.398 comparendos y 511 inmovilizaciones por malos comportamientos de las rutas escolares, y este año ya van 607 y 258.

La difícil situación esta generando malestar en los colegios, que siempre terminan siendo reseñados cuando ocurre cualquier anomalía, algo salido de lo normal, y a las empresas que manejan los automotores que proveen este servicio. El pasado 6 de mayo del 2015, la ciudad quedó conmocionada cuando de dio a conocer el caso de la niña Valentina Parra, de 4 años de edad, estudiante del jardín Los Sauces, en Suba, cuando sus familiares la reportaron como desaparecida e, increíblemente, solo 12 horas después la encontraron en el interior de la ruta del bus del colegio. Las directivas del establecimiento educativo aceptaron el olvido por parte del conductor y la Secretaría de Educación abrió una investigación para determinar qué sanciones impondría al colegio y a la empresa Turistport, cuyo vehículo era de placas WBB 789.

Hace pocos días en el Colegio Británico de Bocagrande en la ciudad de Cartagena, murió una menor de 4 años, por asfixia dentro de una ruta escolar, según sus padres, por el olvido de la persona encargada de la ruta, estos episodios de olvido, los accidentes por exceso de velocidad, las sanciones por falta de documentos o los comportamientos inadecuados de las monitoras, que cumplen un papel muy importante, han resaltado varias anomalías, entre ellas, la falta de conocimientos de los colegios y las empresas transportadoras de un protocolo para el cuidado de los menores. Así lo ratifica el experto en movilidad Ricardo Montezuma. “Somos muy mediocres en el tema. Lo más grave es que los colegios se han desentendido del tema y esperan que la empresa transportadora asuma toda la responsabilidad”, este servicio es costoso, de mala calidad y que además “expone a los niños a madrugar y a soportar recorridos demasiado largos”. Para Montezuma, los colegios deben compartir responsabilidades con las empresas de transporte escolar porque ellos las seleccionan y, además, imponer plataformas tecnológicas que les permitan a ellos y a los padres de familia estar atentos de los recorridos de los niños.

Hoy los colegios que tienen rutas propias cuentan con vehículos muy viejos, que carecen de medidas de protección como cinturones de seguridad. “En los últimos 15 años solo se discute este tema cuando hay accidentes. La labor del monitor de la ruta es quizá una de las funciones más importantes en el transporte escolar. Por eso sorprende que en el top de las faltas, muchos de estos tengan sus documentos incompletos de EPS, AFP y ARL, y lo peor: algunos no portan su cédula. La función de los monitores de la ruta es el cuidado de los menores, la entrega al colegio y a sus padres, el conteo de los estudiantes y la verificación de su estado mientras estén a su cargo y con la tecnología hoy en día esta labor puede ser mucho más efectiva.

A todo esto se suma que el no tener bien identificados al conductor y al monitor pone en riesgo la seguridad de los menores, faltas graves como la ausencia de extintores o dispositivos sonoros de velocidad, debido a que, como cualquier vehículo, las rutas escolares están expuestas a sufrir accidentes, Esta misma semana, el colegio Costa Rica de Fontibón se estrelló con un bus del SITP frente al CAI de esa localidad. En total hubo nueve lesionados. Escenas como estas ocurren a diario.

El programa Ruta Pila, que realiza actividades de control, vigilancia y seguimiento a vehículos de transporte especial en modalidad escolar, en conjunto con la Policía de Tránsito, busca que los colegios y las empresas de transporte escolar cumplan toda la normatividad para evitar accidentes. Eso fue luego del Acuerdo 281 del 2007, expedido por el Concejo de Bogotá, que reglamentó la existencia de operativos especiales sobre vehículos de servicio público especial que presten sus servicios bajo contrato de transporte escolar. “Esto se logra a través de operativos de control con los cuales se verifica el cumplimiento de condiciones de seguridad a beneficiarios del transporte escolar en planteles educativos y sus entornos; en empresas transportadoras y en corredores viales en el Distrito Capital”, dijeron voceros de la Secretaría de Movilidad.

Hoy en día la existencia de tecnología puntualmente para estos vehículos, sin que resulte costoso, el tener un sistema robusto y confiable, con comunicación constante inclusive para las autoridades de control y movilidad está en Colombia con un sistema inteligente, especializado en transporte escolar; en conversaciones con el Jefe de Ingenieros de la empresa VegaTrack, el Ingeniero Carlos Garcia, empresa que presta sus servicios desde la ciudad de Bogotá para toda Colombia, nos comenta las prestaciones de la herramienta: De acuerdo al decreto número 0348 del año 2015 emitido por el Ministerio de Transportes de Colombia, por el cual se reglamenta el servicio público de transporte terrestre automotor especial y se adoptan disposiciones, en el Capítulo 2 de las condiciones y requisitos, artículo 19, numeral 5d, en Estructura de tecnología, se reglamenta como normativa el uso de monitorear la prestación del servicio especial escolar a travez de un sistema de posicionamiento global GPS, donde el proveedor del sistema supervisará la prestación del servicio a la superintendencia de puertos y transportes y a la dirección de transito y transportes de la Policía Nacional, de acuerdo con los protocolos, que para tal efecto se establezcan; se implementarán cámaras de captura de imágenes, dentro de los vehículos destinados al servicio escolar, con acceso a los padres de familia y a la persona que el colegio designe.

Esta normativa por el momento no se cumple y nuestra empresa VegaTrack la ha desarrollado y programado puntualmente para rutas escolares, sin que este signifique un costo muy elevado para las empresas de transporte o para los colegios del país, el sistema Inteligente VegaTrack con Gestión Global de flotas y servicios asociados, desarrolle un sistema único en el momento en América, con un herramienta muy robusta para la captura de imágenes del habitáculo del vehículo en tiempo real, para ser visualizado en la plataforma y consultado en cualquier lugar del recorrido.

Conjuntamente con una app diseñada a medida, se puede tener el acceso tanto para los padres de familia como para los responsables del colegio y/o autoridades pertinentes, la consulta de – Lugar en tiempo real de la posición geolocalizada del vehículo, – fotografía del momento exacto y en tiempo real del habitáculo del vehículo, información del estado del vehículo, seguimiento a la conducción y control absoluto del conductor, mantenimientos tanto preventivos y/o correctivos que se le realicen al vehículo, calificación del conductor, reconocimiento de rutas, alarmas programables, avisos de llegadas a los colegios y/o a la casa de los estudiantes, y diseños a medida de las rutas escolares.

Si las normativas para los vehículos de transporte escolar, se llevaran por parte tanto de los Colegio y/o empresas de transporte, todos estos incidentes, muchas veces lamentables, se evitarían.