Las Mascarillas o tapabocas y su uso obligatorio.
Las mascarillas o tapabocas ya hacen parte de nuestro día a día.
En muchos de los sitios de nuestra cotidianidad ya es obligatorio llevar puesto sobre nuestro rostro la mascarilla o tapabocas, como en el transporte público, en supermercados y los gobiernos de los distintos países lo tienen como obligación y fuerte recomendación al salir a la calle para que podamos protegernos de el virus del Covid-19.
Existen tres tipos de mascarillas: Higiénicas, Quirúrgicas y EPI ( equipo de protección individual ), es recomendable el uso de ellas dependiendo el nivel de contagio que tenga el usuario con la enfermedad. Las Higiénicas no están pensadas específicamente para uso sanitario, pero sirven como complemento a las medidas de distanciamiento físico e higiene y su uso se recomienda a toda persona sana.
Las Quirúrgicas son las que acostumbramos a ver en las clínicas y hospitales, centros de salud y dado que su misión es proteger a quienes están alrededor del portador, esta mascarilla es recomendada a toda persona con síntomas o que se encuentren enfermas.
Las mascarillas tipo EPI son las que suelen tener una válvula de exhalación, son las únicas que protegen al portador al igual que se han convertido en las más escasa de encontrar en el mercado, esta mascarilla se recomienda en su uso para personas que estén en contacto directo con personas sintomáticas o positivos, especialmente para personal sanitario o grupos vulnerables por indicación médica.
En general el uso de las mascarillas tiene como objetivo fundamental es evitar que los portadores contagien a otras personas y para este fin todos las mascarilla lo cumplen, excepto las que tienen la válvula de exhalación. En cuanto a la protección del portador las mascarillas higiénicas no la garantizan, tampoco existen evidencias claras de que las mascarillas quirúrgicas lo hagan, solo las mascarillas tipo FFP2 y FFP3 sirven para este fin y por ello están destinadas prioritariamente a personal sanitario.
Al momento de la compra de las mascarillas se debe tener en cuenta si son reutilizables, si el fabricante no indica que la mascarilla es lavable, no se debe hacer ya que no se podría garantizar que conserve sus propiedades, en caso de ser reutilizable los expertos recomiendan tres métodos para su lavado, en la lavadora con detergente normal y el agua debe estar con una temperatura entre 60 y 90 grados; sumergiendo la mascarilla en una dilución de lejía 1:50 con agua tibia durante 30 minutos y posterior lavado con agua y jabón; de manera excepcional mediante productos de limpieza de superficie autorizados por sanidad y posterior lavado con agua y jabón.