Orión de la Nasa realiza su primer vuelo de prueba.
La NASA emprende el segundo intento de lanzamiento de su nueva cápsula Orión, que supone el regreso de la agencia espacial estadounidense a las naves tripuladas y que en poco tiempo llevará a 4 tripulantes quizá Marte.
La nueva cápsula Orión, esta diseñada para acomodar a cuatro tripulantes, servirá en el futuro para llevar astronautas más allá de la órbita baja terrestre, quizá a Marte. El lanzamiento que se ha realizado hoy es el primer vuelo de prueba de la nave llamada Orión, que en esta ocasión despegará sin tripulación a bordo para ascender a casi 5.800 kilómetros de distancia de la superficie terrestre antes de re- entrar en la atmósfera y amerizar en el océano Pacífico.
Con esta nave Orión, la NASA ha abandonado el modelo de avión reutilizable que inspiró la creación de los shuttles, regresando al esquema clásico de cápsula y cohete que tan buenos resultados dio en tiempos del programa Apolo y que Rusia ha continuado empleando en sus Soyuz con una hoja de servicio casi impecable. La NASA regresa además a un sistema de reentrada y recuperación que no empleaba desde hace 40 años, el amerizaje de las cápsulas en el océano.
La cápsula, que viaja a 24.000 kilómetros por hora, llegará unas 15 veces más lejos que la distancia a la Estación Espacial Internacional (EEI), según recoge Efe. Esta es la mayor distancia que haya recorrido cualquier nave espacial diseñada para el transporte de humanos en las últimas cuatro décadas, desde las misiones Apolo con las que el hombre llegó a la Luna. Después de completar las dos órbitas a la Tierra y recorrer más de 96.500 kilómetros, la cápsula volverá a entrar en la atmósfera terrestre.
Esta misión se parece a la Apolo 4 de noviembre del año 1967, aunque en aquella ocasión la altura máxima que alcanzó la órbita fue de 18.340 km, por lo que el módulo de mando alcanzó una velocidad de 40.000 km por hora en la re-entrada. Los resultados de este vuelo serán analizados de cara a seguir adelante en el desarrollo de la cápsula Orion, que los más optimistas estiman que podría realizar su primer vuelo tripulado en 2018 -aunque hay quien opina que será más bien a partir de 2020- con una capacidad para cuatro astronautas.