Suspenden la cumbre de los Nobel de la Paz tras denegar Sudáfrica el visado al Dalái Lama
La alcaldesa de Ciudad del Cabo, Patricia de Lille, anunció hoy la suspensión de la cumbre anual de premios Nobel de la Paz, que debía celebrarse este mes en esa ciudad, en protesta por la negativa del Gobierno sudafricano de conceder el visado al dalái lama, uno de los laureados invitados. «Después de muchas consultas y deliberaciones, se ha decidido que la cumbre mundial de premios Nobel de la Paz de 2014, prevista del 13 al 15 de octubre en Ciudad del Cabo, sea suspendida», dijo De Lille en una conferencia televisada por la televisión pública sudafricana.
«La primera razón es que el Gobierno sudafricano ha rechazado darle a su santidad el dalái lama el visado para asistir a la conferencia», explicó la alcaldesa, miembro de la primera fuerza de oposición en el Parlamento nacional, la Alianza Democrática (AD). De Lille anunció que el secretariado permanente de la conferencia de premios Nobel de la Paz se plantea buscar una nueva sede para el evento, y aseguró que la única posibilidad de que Ciudad del Cabo albergue la cita es que se conceda «de forma incondicional» el visado al líder tibetano.
La alcaldesa recordó la carta firmada recientemente por catorce premios Nobel invitados a la conferencia, en la que exigían al presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, que permitiera la entrada del dalái lama al país. La misiva no ha recibido hasta ahora ninguna respuesta de Zuma o su Gobierno, al que se acusa de no permitir el viaje del dalái para complacer al Gobierno chino.
Junto a De Lille compareció el expresidente sudafricano y premio Nobel de la Paz Frederik de Klerk, que criticó el boicot anunciado por varios premios Nobel a la reunión prevista en Ciudad del Cabo. «Estoy convencido de que no fue la respuesta más adecuada a la denegación del visado», declaró De Klerk, que señaló que tanto él como el también laureado con el premio Nobel, el arzobispo sudafricano Desmond Tutu, trataron de convencer a los invitados para que asistieran.
Con ello, indicó De Klerk, pretendían convertir la conferencia en una protesta por la actitud ante el dalái lama del Gobierno sudafricano, que ha denegado tres veces en cinco años el visado al líder tibetano. De Klerk se mostró «decepcionado» de que los premiados «no vengan y protesten aquí en Sudáfrica».
Estaba previsto que Desmond Tutu también participara en la rueda de prensa con De Lille y De Klerk, pero no pudo asistir al no encontrarse bien.
El pasado 4 de septiembre el representante del dalái lama en Sudáfrica anunció que el Gobierno le había adelantado que denegaría la solicitud de visado presentada ante su legación en Nueva Delhi por el líder espiritual, que vive exiliado en la India desde 1959 y es un símbolo mundial de la resistencia contra el régimen chino. Horas después, el dalái lama canceló su viaje a Sudáfrica.
Por su parte, el Gobierno de Pekín se congratuló de la decisión de Sudáfrica de no conceder el visado al dalái lama.
China es el mayor socio comercial de Sudáfrica que, junto al gigante asiático, forma parte del grupo de las primeras economías emergentes conocido como BRICS: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.